El próximo lunes 27 de abril empezarán a habilitarse las obras de construcción en la provincia, y en ese marco el gobierno exigirá a las empresas el cumplimiento de los protocolos de higiene y seguridad para cuidar a los trabajadores.
Son normativas vigentes establecidas por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la OMS, y sugeridas como referencia general por la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (Uocra) y la Cámara Argentina de la Construcción. Los protocolos abarcan cuidados, uso de elementos, herramientas y recomendaciones desde el ingreso a la obra y durante la jornada laboral.
Cada empresa y su responsable de Seguridad e Higiene podrá confeccionar, implementar y dar estricto cumplimiento a medidas más específicas si así lo consideran, de acuerdo con las particularidades que requiera el tipo de obra y las tareas prestadas por los trabajadores y trabajadoras.
Al momento de ingresar a la obra
El protocolo prevé que la fila de acceso a la obra será con una separación mínima -entre trabajadores- de 1,50 metros. A los efectos de evitar aglomeraciones, los trabajadores de las empresas subcontratistas deberán tener diferentes horarios de acceso.
Todo empleador diariamente deberá realizar un estricto control de las personas que ingresen a la obra, controlando además sobre el trabajador o trabajadora la existencia de alguno de los síntomas (tos, decaimiento y dificultad respiratoria) y su temperatura corporal. Este control incluye a personal técnico y profesionales, y deberá estar a cargo de la empresa contratista principal. El equipo encargado de control de ingreso debe estar equipado con un traje tipo Tyvek, máscara facial, barbijo y guantes de látex.
En el caso de que algún trabajador o trabajadora tenga una temperatura superior a los 38° (grados centígrados) no podrá ingresar a la obra, se apartará de los lugares comunes y se comunicará la situación a la autoridad sanitaria. La misma medida se seguirá en caso de presentar alguno de los síntomas mencionados.
Durante la jornada laboral
El protocolo establece que durante las horas de trabajo deberá ser frecuente el lavado de las manos o el uso de alcohol en gel, así como mantener distancias con el resto de los compañeros (no menos de 1,50 metros), no salivar o expectorar en el suelo ni taparse con el pliegue del codo al estornudar o toser.
También se debe evitar el contacto físico con otras personas (saludos o besos) así como las reuniones grupales. Tampoco se podrá compartir mate, vasos, botellas, utensilios o cubiertos ni fumar. Aquellas tareas que requieran de acciones colaborativas entre trabajadores o trabajadoras, deberán realizarse evitando cualquier tipo de contacto entre las personas. Las salidas para la compra de insumos o alimentos, deberá ser coordinada entre la empresa y el delegado, pudiéndose asignar un único trabajador o trabajadora por cada diez.
Si durante la jornada laboral, alguna o algún trabajador presenta síntomas como fiebre, tos, dificultad respiratoria, secreción y goteo nasal, fatiga, dolor de garganta y de cabeza, escalofríos, malestar general, deberá dar aviso inmediato a la jefatura de la obra o al delegado, quienes deberán llevar al trabajador o la trabajadora al punto de aislamiento provisorio definido, evitando todo contacto y solicitando la asistencia del Ministerio de Salud.
En los lugares de trabajo ¿qué debemos hacer?
Cada empleador deberá proveer el suministro de insumos de limpieza e higiene personal (disponer de alcohol en gel en acceso a obradores o lugares comunes y jabones en sanitarios). También, deberá designar a uno o varios encargados y una o varias cuadrillas para limpieza y desinfección, de manera de mantener las máximas condiciones de limpieza. Se debe ventilar con regularidad los ambientes de trabajo, aun en épocas de bajas temperaturas.
La jefatura de obra debe conformar cuadrillas operativas previendo las suficientes separaciones entre los puestos de trabajos activos, con una persona en 4 a 6 metros cuadrados, manteniendo los 1,50 metros de separación (tanto en baños, vestuarios y espacios comunes). La limpieza húmeda de objetos y superficies debe ser frecuente y los espacios comunes de trabajo recibir entre 4 y 8 limpiezas diarias. Se recomienda usar lavandina común y alcohol líquido. Uso de elementos de protección personal.
El protocolo establece que aquellas y aquellos trabajadores, técnicos y profesionales que no cuenten con los elementos de protección personal adecuados, no podrán permanecer en la obra. Aquellos que cuenten con estos elementos deben lavarse y desinfectarse las manos antes de su uso y no pueden compartirlos. No pueden retirar la ropa de trabajo de la obra, ni el calzado de seguridad y deben entregarla en paño, siguiendo el protocolo establecido por el empleador.
Los elementos descartables no deben reutilizarse, sino ser arrojados a contenedores adecuados e identificados.
Uso de vehículos y herramientas, máquinas y equipos de trabajo
Para el uso de estos elementos se debe tener en cuenta la importancia de limpiar herramientas y máquinas de mano y evitar el intercambio de herramientas y equipos sin haberlos desinfectado. En caso de usar vehículos para transporte personal, se desinfectará antes y después de cada traslado y se mantendrá una separación entre plazas de 1,50 metros viajando con ventanillas abiertas. También hay que desinfectar de forma regular los comandos, volantes, tableros, puertas y espejos.
Para más información, ingresá a www.argentina.gob.ar/salud/coronavirus-COVID-19 y, en caso de aislar a la persona que presenta síntomas, evitar contacto y contactar a la autoridad sanitaria del Chaco, comunicándose 0800‐444‐0829.