Durante la semana el Ministerio de Desarrollo Social a través de la Subsecretaría de Economía y Políticas Sociales constató el funcionamiento de programas nutricionales y alimentarios que se aplican en localidades de El Impenetrable.
Del trabajo de relevamiento participó el subsecretario Diego Luna, técnicos y profesionales de la Unidad Provincial de Seguimiento Nutricional, del Programa de Atención al Celíaco, de las unidades ministeriales a cargo de la articulación con comedores escolares y merenderos comunitarios, y un equipo amplio de trabajadores y trabajadoras.
Juan José Castelli, Villa Río Bermejito y El Espinillo fueron las ciudades en las que se mantuvieron encuentros entre los representantes del ministerio provincial y de los gobiernos locales, para acordar lo que será la planificación anual.
En lo que hace al abordaje en territorio, se llevaron a cabo los habituales controles de antropometría (de peso y talla) de niños y niñas, y se efectuaron encuentros con actores sociales, a partir de las demandas comunitarias que surgieron como también se analizaron el rumbo de las políticas sociales en esos municipios.
“En esta oportunidad fueron estas comunas, pero vamos a llegar a todos los municipios con los cuales tenemos un trabajo constante y sostenido, reforzando lo que iniciamos en tiempos de pandemia y aislamiento y que la intención es ampliar la presencia territorial del Estado y sus operadores”, señaló Luna.
Con la Unidad de Seguimiento Nutricional se trabaja en detección y atención de niñas, niños y embarazadas con déficit nutricional, se proveen módulos alimentarios diferenciales y luego se efectúan controles sanitarios periódicos y talleres para la elaboración de comidas saludables.
Una tarea similar se realiza con el Programa de Atención al Celíaco, también brindando contención alimentaria y espacios de educación sobre la preparación de los alimentos con lo otorgado en los módulos, mientras que con comedores escolares y merenderos o comedores comunitarios, la labor se centra en el repaso de la demanda que cuentan, la elaboración de menúes saludables y asegurar una logística que garantice un stock permanente de mercaderías, como también dar impulso a las huertas familiares y comunitarias para lograr seguridad y soberanía alimentarias.