Este martes finalizó el primer curso de formación de Instructores Penitenciarios, con un acto realizado en el departamento Escuela del Servicio Penitenciario y de Readaptación Social de la Provincia. La ministra de Seguridad y Justicia Gloria Zalazar participó del evento junto al director general de la institución, Juan José Pedroza, y a los directores y jefes penitenciarios. Continúan además los programas de profesionalización en el interior de la provincia.
Del curso realizado en el Servicio Penitenciario Provincial egresaron 10 alumnos (oficiales y suboficiales), adquiriendo la especialización de instructor penitenciario”. El curso contó con dos etapas: una virtual, ejecutada durante 35 días a través de la plataforma educativa del departamento Escuela, y una presencial, donde se aplicó el conocimiento teórico aprehendido en la práctica, con nuevas metodologías de enseñanza, oratoria y retórica además del entrenamiento penitenciario.
El Plan de Seguridad lanzado el pasado 11 de febrero por el gobernador incorpora la profesionalización de las fuerzas de seguridad, capacitando a 1.900 agentes con tres diplomaturas, cinco cursos y tres tecnicaturas. Esto viene a acompañar otros ejes que se implementaron desde el inicio de la gestión en 2019: el fortalecimiento edilicio dado a través de las refacciones y construcciones previstas, y la mejora logística mediante la adquisición de herramientas de trabajo, vehículos, cámaras, etc.
Este jueves la ministra participará de una jornada sobre seguridad aeronáutica, en la que los Ministerios nacionales de Seguridad, Defensa y Transporte difundirán sobre el procedimiento y la gestión de la información respecto de las operaciones aéreas realizadas en zona ADIZ.
El Gobierno busca profesionalizar a las Fuerzas de Seguridad de la provincia por medio de un proceso de formación innovador y dinámico, que les brinda herramientas para desempeñar un correcto accionar en casos de auxilio y protección a víctimas. Se hace hincapié en el respeto irrestricto de los derechos humanos, evitando el abuso de poder y el uso excesivo de la fuerza; capacitándolos en la preservación del lugar de los hechos, entre otros.