Los Pumas lograron una victoria histórica ante Australia en Santa Fe y se llevaron el partido con un contundente marcador de 67-27 para conseguir el segundo triunfo en el Rugby Championshipen esta cuarta fecha del certamen. Ahora disputarán un doble choque contra Sudáfrica que podría mejorar esta actuación, que ya es la mejor desde que se unió el certamen en 2012. El elenco argentino llegaba a esta cuarta jornada con el triste antecedente de la derrota en La Plata por 20 a 19 en la última jugada del partido. El equipo de Felipe Contepomi había disputado un digno primer tiempo, pero los errores y la falta de sincronización en el complemento hicieron que se les escapara un encuentro que estaba para ganarlo, y que finalmente se llevaron los Wallabies. Por su parte, los dirigidos por Joe Schmidt, se reivindicaron con ese primer triunfo de las dos caídas iniciales en el torneo y cortaron la serie negativa de los últimos triunfos argentinos que habían logrado en Parramatta en 2023 (34 a 31), y en San Juan un año (48 a 17). UN ARRANQUE PAREJO E IMPRECISO Con la patada de Tomás Albornoz dio comienzo el partido en la soleada y calurosa tarde santafesina. Los Pumas salieron decididos a llevarse por delante a Australia que cometió la primera infracción para que Albornoz de penal abriera el score. Pero el equipo de Joe Schmidt no se quedó con eso y fue a buscar el descuento. La infracción argentina llegó, y el penal de Donaldson igualó el match en 3 tantos. El partido era parejo tanto en el juego como en las imprecisiones. El primer scrum apareció a los diez minutos y los dirigidos por Contepomi sacaron la pelota rápida, pero enseguida la perdieron. Los errores seguían siendo moneda corriente en cuanto al manejo y las pérdidas de balón para los argentinos. El partido era desprolijo y seguía igualado en 3 tantos. Hasta que otro error argentino hizo que llegara el primer try del partido: tackles imprecisos, que no llegaron a tiempo, y los Wallabies que consiguieron la conquista inicial a través de Tizzano. La conversión de Donaldson puso el 10 a 3. Los Pumas estaban dolidos y fueron a buscar su try. Apareció Marcos Kremer para apoyarlo, pero con una pantalla de Lavanini, lo que hizo que la jugada fuera anulada y el score siguiera igual en casi 20 minutos. Australia era prolijo y, sin hacer demasiado, sumó otra vez a través de un penal de Donaldson para poner el 13 a 3. Los Pumas no encontraban ni orden, ni desequilibrio. Se les hacía difícil poder jugar en el campo del rival. En 25 minutos los errores de manejo se acentuaban en el equipo argentino que a pesar de ello buscaba y buscaba con pases de un lado al otro del ancho de la cancha. Pero siempre le faltaba el broche para terminar la jugada y no podía concretarla. Australia con una defensa ordenada, aprovechaba los errores argentinos y así llegó el segundo try visitante en una muy buena jugada en donde el fullback Andrew Kellaway apoyó sobre la bandera izquierda del ingoal nacional. La conversión de Donaldson estiró la diferencia y puso el 20 a 3 a los 30 minutos. Un resultado amplio que Los Pumas debían achicarlo. Y así fue, en la siguiente jugaba apareció Juan Cruz Mallía en toda su dimensión, para tomar el balón y jugarla, Matera se la dejó servida a Mateo Carreras y el wing tucumano con una veloz corrida apoyó el primer try de Los Pumas. El gol de Albornoz dejó el resultado 20 a 10, para mostrar la primera sonrisa de los dirigidos por Contepomi, que no se conformaron y fueron por más. Era el momento. Por primera vez, Australia parecía no poder frenar los embates de Los Pumas. Y así llegó el try de Julián Montoya para festejar por duplicado en su partido 100. Albornoz sumó los dos puntos de la conversión y Los Pumas se acercaron a tres puntos (17-20) Así se fue el primer tiempo, con un equipo australiano que aprovechó los errores para sumar y con unos Pumas que en los últimos diez minutos volvieron a creer, anotaron y dejaron abierto el partido. UN SEGUNDO TIEMPO TODO CELESTE Y BLANCO Los Pumas salieron decididos y fueron a fondo. El calor era intenso y había que jugar en el campo australiano. Buscaron con juego asociado hasta que Oviedo quedó a escasos centímetros de apoyar, y apareció el mendocino Juan González para conquistar el try. Albornoz convirtió y dejó las cosas 24 a 20 para los de Felipe Contepomi. Argentina seguía presionando, Donaldson ya no podía manejar los tiempos y los argentinos estaban cada vez mejor, decididos a ir por más. Y así fue, luego de un scrum la pelota salió rápida para que Lucio Cinti fuera a fondo, el pase llegó a Pablo Matera y el tercera línea consiguió apoyar un nuevo try argentino. El gol de Albornoz puso el 31 a 20, en el mejor momento del equipo de Felipe Contepomi. El partido era otro. Los Pumas dominaban, se sentían superiores y debían liquidarlo. Era el momento porque Australia no podía reaccionar y con un penal Los Pumas se alejaban un poco más para poner el 34 a 20. Lo que vendría sería mejor: la siguiente jugada fue la mejor de la albiceleste en todo el partido. Comenzó con Bello pescando, Molina jugando y Oviedo definiendo para conseguir otro try y liquidar el partido. El gol de Albornoz puso el 41 a 20. Australia buscó reaccionar, pero los locales estaban más firmes que nunca, y respondieron ante un intento de Alaalatoa sobre la bandera izquierda que Albornoz frenó. De todas formas los Wallabies intentaron achicar y consiguieron un nuevo try. La conquista fue de McDermott y la conversión de Tom Lynagh para dejar el score 41 a 27. Los Pumas sabían que no debían dejarlos crecer. Estaban comprometidos a demostrarlo. Y por eso en otra gran acción entre Santiago Carreras, Cinti y Juan Cruz Mallía llegaron nuevamente a vulnerar el ingoal visitante para poner el 46 a 27. Con ese panorama, salió Bello lesionado y regresó Sclavi. El equipo nacional dejaba todo en cada acción, se demostraba que podía una y otra vez, se convencía; y otra vez Juan Cruz Mallía sobre la bandera derecha llegó al try. Albornoz convirtió y dejó el resultado 53 a 27. Ya por ese entonces la fiesta era completa. Oviedo era […]